SmarterMRP integra la calidad en el propio proceso de producción. Cada comprobación, verificación y problema se ejecuta, registra y supervisa en tiempo real sin papel, retrasos ni ambigüedades.
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Muchas fábricas siguen tratando la calidad como un paso independiente: formularios en papel, controles manuales desconectados del sistema y datos revisados solo después de que se hayan producido problemas.
Esto provoca lotes bloqueados, reelaboraciones, desperdicios... y, a menudo, sin saber por qué ha ocurrido.
SmarterMRP convierte el control de calidad en una parte natural de las operaciones. Los operadores saben qué comprobar, cómo comprobarlo y cuándo registrarlo. La calidad no es un departamento, es una práctica continua integrada en toda la fábrica.
Un plan de producción sólido es inútil si no se dispone de lo necesario para ejecutarlo.
Defina qué controles se aplican a cada producto, operación o lote: inspecciones visuales, mediciones, listas de verificación o muestreos.
Siempre que haya una desviación, registre el problema, la causa, la cantidad afectada y el resultado: reelaboración, rechazo, cuarentena...
Cada comprobación está vinculada al lote, al producto, al turno y al operario. Se puede reconstruir el historial de calidad de cada unidad incluso meses después.
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Vea qué se comprobó, cuándo, quién lo hizo y con qué resultado. Ideal para auditorías internas, revisiones externas o mejora continua.
La calidad no se comprueba al final. Se integra en cada paso con datos, contexto y responsabilidad.
Diseñado para ser operativo, no burocrático, centrado en lo que más importa: cuándo y dónde suceden realmente las cosas.
Una interfaz sencilla e intuitiva diseñada para que cualquier operador pueda registrar la información con precisión y sin errores.
Totalmente configurable por producto, proceso, cliente o estándar, lo que le permite adaptar el sistema a sus necesidades específicas y adaptarse perfectamente a diferentes flujos de trabajo y requisitos.
Integrado de forma nativa con los sistemas de producción, mantenimiento y trazabilidad, proporciona una conexión perfecta que mejora la eficiencia, garantiza una supervisión continua y permite una responsabilidad total en todas las operaciones.
Gracias a su rápida implementación, solo tiene que configurar las comprobaciones necesarias y empezar a utilizar el sistema de inmediato, sin necesidad de configuraciones complejas ni largas instalaciones.
Con menos errores y productos no conformes, y una mayor tasa de éxito a la primera, su operación gana en eficiencia y fiabilidad. La información se registra con precisión, lo que genera plena confianza en los datos y en el sistema de calidad.
Esto no solo reduce las repeticiones, sino que también agiliza las auditorías, haciéndolas más rápidas y menos exigentes.
El resultado es una cultura de calidad que se extiende por toda la organización, impulsando la mejora continua desde el núcleo operativo.